Gobernadores locos?

Fuente: Caras y caretas 1903 6(230)
Ilustrador: Mayol

Sobre el caso del gobernador de La Rioja, conozco muy poco. Sé que en La Rioja la transmisión del poder era a través de lazos políticos con cuñados y futuros cuñados. A esta política de círculo familiar no escapó Joaquín V. González que predicaba la necesidad de una efectiva democracia. De la extensa nómina de gobiernos elegidos por los acuerdos de clanes, en 1901, figuró el gobierno de Wenceslao Frías, quién contó con el apoyo de su cuñado Leónidas Carreño Villafañe, quién a su vez era el instrumento de su concuñado el Ministro del Interior, Joaquín V. González . En oportunidad del reportaje hecho al Diputado Nacional Dr. Leónidas Carreño, en el único periódico de oposición, denominado El Independiente, se hizo aparecer la administración del Gobernador Arcadio de la Colina como un verdadero desastre.
En Caras y Caretas se dice que Arcadio de la Colina clamaba contra Joaquín V. González que lo quería hechar abajo, porque él contrariaba sus fines políticos. No comprendía como se podía ser gobernador y loco al mismo tiempo y se acordaba de que durante los gobiernos anteriores al suyo, La Rioja había pagado sin chistar los lujosos gastos de sus gobernantes, costeandoles viajes ... y hasta vinos finos! Le dieron quince días de licencia y después lo declararon loco.

(Información extraída de Genealogía de la tragedia argentina. Disponible en:
http://www.er-saguier.org/obras/gta/Tomo-V/Seccion-B/Capitulo-5/0-SOC-10.pdf
Accedido el 31/07/2009)

Fuente: Caras y caretas 1903 6(228)

El otro caso es el de la provincia de Buenos Aires, cuyo gobernador, Marcelino Ugarte, se ganó la hostilidad de la oposición, la cual solicitó la intervención federal.