Capitulación de Junín (Continuación)
Llegó el Capitán Oliver y me avisó que el General enemigo había hecho alto y me invitaba a una conferencia, accedí a ella y después de media hora de esplicaciones acordé la rendición bajo las condiciones siguientes:
1ª Amnistía para los ciudadanos que forman parte del ejército a las órdenes del General Mitre.
2ª Garantías para la vida y decoro de los Generales, Gefes y Oficiales, desde el General Rivas hasta la clase de Alferez.
3ª Indulto completo a todos los soldados de línea que se hallan en el caso de los ciudadanos.
He sido benigo, Sr. Ministro, con el enemigo deshecho y que reconocía por boca de su mismo General que la guerra había terminado en la Verde, porque sabía de la manera como había sido recibido el emisario Lanusse y más o menos los términos de rendición que por ese emisario acordaba el gobierno.
Además influyó en mi animo el anhelo de ahorrar sangre, principalmente del enemigo, que también era argentina y que no tengo inconveniente en decirlo, no habría podido resistir al empuje y la decisión de nuestras armas, si hubiera decidido seguir adelante.
Impuesta la rendición en los términos antes mencionados, se ha ocupado todo el día en desarmar las fuerzas sometidas y puedo ya decir a V.E. que según los partes principales que he recibido el día de hoy, he visto someterse y desarmar ante las fuerzas de la Nación un ejército compuesto de dos Generales, cuarenta y un Gefes, doscientos noventa y cinco Oficiales y algo más de tres mil hombres de tropa, de los cuales mas de trescientos de línea, de los cuerpos que se rebelaron en la frontera Sud.
Después de este hecho a que han contribuido noble y dignamente todas las fuerzas que se hallaban reunidas a mis órdenes el 2 del corriente, puedo asegurar a V.E. que la paz en la Provincia ha sido restablecida por el imperio de la autoridad y de la ley.
Réstame ahora recomendar a V.E., al Sr. Presidente y a la Nación la conducta decidida de todos los Gefes, Oficiales y soldados que han tomado parte en esta incruenta pero gloriosa jornada.
Por intermedio de V.E. pido al Sr. Presidente el empleo de Coronel para los Comandantes Levalle, Villegas y Lagos, cuyo valiosísimo concurso he podido apreciar de cerca, y también un ascenso para los Gefes y Oficiales de las divisiones a su mando que tan dignamente los han secundado.
Dios guarde a V.E.
José I. Arias.
[Fuente: Memoria presentada por el Ministro Secretario de Estado en el Departamento de Guerra y Marina Dr. D. Adolfo Alsina al H. Congreso Nacional en 1875]
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