La noche del 31 de mayo de 1905, a un dia de haber llegado a Paris, el rey Alfonso XIII sufrio un atentado al volver de la Opera.
Asi lo relato ante la autoridad una testigo Mlle. Marie Legrand, joven de quince años, cuyo acompañante fue herido. "Me encontraba, dijo, en las primeras filas, y pude ver lo que sucedio. El rey saludaba a la muchedumbre, levantando la mano a su casco. De repente percibi una gran llama azulada que trazo una rafaga luminosa en el espacio, a cosa de un metro del suelo, y que fue a terminar unos diez centimetros detras de la rueda izquierda del coche real. Inmediatamente sono una detonacion ensordecedora ... El caballo de un guarda municipal, lanzado al aire, habia vuelto a caer con el vientre deshecho. En tierra yacian dos agentes, dos hombres mas, entre ellos M. Hallet, vecino mio, que me acompañaba, y una mujer que se retorcia ensangrentada, lanzando terribles gritos."
Fuente: Caras y caretas 1905 8(353)
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