Caricatura de politicos

Un atento análisis hecho por medio del maravilloso aparato de Roentgen, nos ha permitido sorprender las siguientes particularidades en el interior de nuestros hombres públicos:

1- Como se verá, el esqueleto del doctor Pellegrini está dotado de más articulaciones que el resto de los mortales. Fijándose detenidamente se notará que tiene cuatro codos y desarrollado enormemente el brazo derecho. De estas anormalidades, el doctor ha sabido aprovecharse en política; los codos le han servido para abrirse cancha, la muñeca para imponerse y su inmensa altura, para sobresalir en todas partes como hombre de talla. 2-El esqueleto del doctor Quintana, es un modelo de maniquí que ya quisieran tenerle más de cuatro sastres para hacer llamativo el ventanal de sus establecimientos. Esta contextura especial del doctor, explica perfectamente que la ropa que usa se enorgullezca de poder lucirse en tan aristocrático figurín. 3- En la osteología del general se observan varias anormalidades: curvatura del espinazo, disloque general de costillas y un apéndice, el que no deja lugar a dudas para que nosotros podamos decir con los darwinistas "que el hombre trae cola". 4- El doctor Uriburu nos presenta un tórax en forma de gusanillo o tirabuzón, lo que prueba, que es hombre de andarse con vueltas. La larga prolongación de sus brazos, lo mucho que abarca y sus pies ramificados, que sabe agarrarse para no caer; opinión ésta en la que también está de acuerdo un doctor afamado. 5- El esqueleto del doctor Terry ha tenido que sacrificarse al poco espacio de que disponía, y a la inversa de lo que sucede al doctor Pellegrini que tiene articulaciones hasta por lujo, el doctor Terry no cuenta sino con las necesarias para sus relaciones. Esta es la causa por la cual su andar semeja al de un tenor de ópera barata, y de lo que se deduce que el doctor no podrá ir lejos en el terreno del arte político. 6- En la armazón o sea del ministro Riccheri se echa de ver en seguida su enorme pera, lo que justifica lo fructífero de su ministerio; así mismo, se ve que su esqueleto está armado de un chafarote, pero con la particularidad de estar envainado en un paraguas. Otro detalle, no tiene necesidad de ponerse las botas, la naturaleza pródiga ha querido con esos aditamentos hacerlo impermeable para ponerlo a cubierto de las lluvias. 7- La osamenta del coronel Gramajo, no vino al mundo con más armas que el tenedor y la cuchara y con las cuales el coronel ha reñido batallas pantagruélicas. La curvatura de sus piernas y la enorme planta de sus pies tiene explicación. Las plantas se ensancharon para poder dormir de parado y las piernas se arquearon al peso del abdómen.

Fuente: Caras y caretas 1904 7(277)

Ilustrador: Cao